Las películas futuristas me gustan por la manera en que presentan a la sociedad. La trama me es absolutamente indiferente. Lo interesante es ver cómo pinta el director a la sociedad , lo que a fin de cuentas justifica la trama de la película. Lo que nunca he entendido es la idea generalizada de representar a la sociedad futurista como algo totalmente burocratizado, sistematizado , ordenado, cuando cada vez queda más claro que cualquier individuo, pobre o rico, tiene la capacidad para ignorar casi totalmente al Sistema, si eso es lo que quiere. El ejemplo más claro de esa cuadradez aparece en Brasil (Gilliam, 1985). En la foto de arriba a la izquierda se ve una de las oficinas centrales del gran sistema que controla todo. Todo. Por ejemplo, hay una gotera en el baño? Sí, pues lo debe saber el Sistema para que vengan a taparla. Y así todo lo demás. Lo mismo se ve en Alien ( Scott, 1979). Aquí una máquina interesada solamente en la eficiencia controla la vida de todo aquel que depende